El desarrollo de una familia a lo largo de su ciclo vital transita entre momentos de estabilidad y la superación de crisis o cambios que pueda sufrir.

El modelo de psicoterapia clásico nace en sus albores del modelo médico, donde el ‘paciente’ presenta una dificultad y el médico lo resuelve. Ha llovido mucho desde entonces. La psicoterapia ha evolucionado en base a nuestras necesidades. Actualmente se considera que cada persona es su propio motor de cambio y que las circunstancias que le rodean no pueden obviarse.

No es casual que en los últimos años se haya despertado un gran interés por el enfoque de terapia familiar sistémica. Desde este enfoque no solo se atiende a la persona designada con una dificultad sino a toda la unidad familia. Se da valor al entorno más próximo de la persona, su familia, en este caso. La terapia familiar sistémica asume que en un núcleo familiar todos comparten sueños y sufren las dificultades de cualquiera de sus miembros.

El punto de vista de este modelo terapéutico se basa en la perspectiva sistémica. En ésta el sistema (familiar, en este caso), no es solo la suma de las partes, es decir, los miembros de la familia no son entes aislados, sino que forman un todo que dispone de una dinámica interaccional concreta. Los miembros del sistema familiar mantienen un equilibrio que va variando a lo largo del tiempo.

A través de la terapia familiar sistémica el núcleo familiar desarrolla la creencia de que su propio sistema es mucho más que la suma de todos sus miembros y toma más conciencia sobre el condicionamiento que se produce en el comportamiento del otro por la interacción entre los miembros.

Como terapia centrada en soluciones, la terapia familiar sistémica parte de la premisa que las condiciones iniciales en la que comienza cualquier proceso de cambio no determinan el efecto final. La familia, acompañada por la terapeuta, identifica y pone en práctica un repertorio más amplio de estrategias para apoyar a sus miembros.

¿En qué consiste la terapia familiar sistémica?

El trabajo en terapia familiar sistémica abarca diferentes aspectos de la formación de la familia como son características de la infancia de los progenitores, estilo de apego, influencia de la familia de origen de cada uno de ellos/as, formación de la pareja y bienvenida de los hijos e hijas, diferentes etapas del desarrollo de la familia, comunicación y gestión emocional dentro del sistema familiar y posibles crisis que puedan afectar a sus relaciones, entre otros.

Las relaciones sanas también se basan en el equilibrio entre el refuerzo positivo y el establecimiento de límites. Este hecho consigue que los individuos crezcan confiados en su pertenencia incondicional a su familia creyendo en sus propias capacidades.

Algunos de los autores de más impacto dentro del enfoque familiar sistémico son Bateson, Haley, Watzlawick, Minuchin y Selvini-Palazzoli.

Desde Psicologodemadrid seguimos formándonos y creciendo para ofrecerte el acompañamiento que más se ajuste a tus/vuestras necesidades. Integramos diferentes modelos de terapia como la terapia individual, la terapia familiar sistémica, y diferentes técnicas como Método Shec, EMDR, Caja de Arena y más.

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